La familia se "refugia" en la tienda en los primeros días del mes de diciembre del año 36. La vivienda es lóbrega y fría. La tienda está orientada al norte y prácticamente solo recibe al sol en los meses del verano. La tienda tiene el espacio de despacho con acceso a la cueva que habrá dar mucho juego durante la contienda., una trastienda y a partir de ahí se accede por la izquierda a la puerta que comunica todo el conjunto con el portal de la finca y a un pequeño retrete. De frente viniendo de la trastienda, y siguiendo el pasillo, a la izquierda la cocina y continuando, al final a la izquierda, una habitación que hará de dormitorio. Tanto la cocina como la habitación del final tienen ventanas que dan a un patio interior de la finca. También el retrete posee un ventanuco al mismo patio. Este patio, que se convertirá en el espacio para el recreo de los pequeños es sumamente frío porque, puede afirmarse, que nunca han llegado los rayos del sol a su suelo. Tiene una tina, cuba de agua, que jamás debió de ser renovada, porque el agua está cubierta por una capa de grasa y suciedad de varios centímetros de espesor. Al final del patio, a la derecha y como continuación del dormitorio de la vivienda de la tienda vive un matrimonio de ancianos que son los porteros de la finca, el Sr. Pepe y la Sra. Bernarda. Así que la familia está instalada en la tienda y allí va a permanecer tres años, en tanto que su vivienda en el piso que tuvo que abandonar ha sido ocupada por algunos que no han tenido miedo a la situación ni respeto al contrato de alquiler que ellos no habían suscrito y se supone que tampoco pagaban.
El negocio de la tienda languidece. Los artículos vendidos en los meses anteriores no han podido ser repuestos en su totalidad porque los almacenes mayoristas también sufren la escasez. Y llegará un momento en que el polvo se adueña de los espacios de las vitrinas y del escaparate. La preocupación empieza a fijarse en la alimentación. Se empieza a carecer de lo más elemental. También se nota que se está muy cerca del frente. Pasan compañías de soldados por delante de la tienda con material de guerra. Un día la aviación deja su señal en el edificio de enfrente. Mis padres estudian la posibilidad de trasladarse con todo a la tienda y vivienda de mis abuelos paternos que está situada más hacia el centro. Pero eso sería perder todo lo recorrido hasta entonces y no están por la labor. Deciden permanecer allí y...que sea lo que Dios quiera. Esto último dicho para adentro. La autoridad correspondiente ha hecho un plan de defensa que consiste en abrir en el subsuelo de varios edificios entre ellos el que nos cobija una galería subterránea para protegerse en caso de bombardeos. La cueva de la tienda está conectada a esa galería y mis padres son advertidos de que cuando suene la señal de alarma han de abrir la puerta y dejar que los vecinos bajen a la cueva y penetren en el refugio. La palabra "Refugio" aparece pintada en la fachada de la tienda con un flecha que indica la dirección para acceder al mismo. Así se entra en el año 1937.
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